lunes, 25 de abril de 2011

Una carroña




Una adaptación del poema "Una carroña " De Charles Baudelaire.
Extraído del celebre libro Las flores del mal.

Con el alma podrida

Estas son mis pasiones, aquellas que me elevan a paraísos paralelos a lo celestial y lo bueno. Son mi magia y mis ganas de estar bien. Por que todos y cada uno de nosotros tenemos un lado oscuro, un lado que pocas veces nos negamos a mostrar. Como un hijo mal parido, o deforme el cual nos avergüenza, pero es tan nuestro, es tan de nosotros pues por sus venas corre la misma sangre, que lo escondemos en lo recóndito de una de las habitaciones de nuestro inconsciente. 
Pero hay quienes no tenemos más hijos para mostrar y no entregamos a nuestra deformidad en tiempo completo. Preferimos vivir el lado oscuro de nuestro ser y con orgullo vamos por la calle caminando con él. Nuestro pequeño monstruo, que nos mira con su rostro horrendo y nosotros lo correspondemos con una mirada llena de amor. Amor propio. 
Por que vivir como los demás dicen no basta para ciertas mentes inquietas. Somos uno de esos chicos acelerados que nos gusta andar de paseo por los caminos más retorcidos de este lugar al que llamamos mundo. 


Vivir, resistir, soñar y convertir la nada en realidad... 
La vida es un sueño, soñar es vivir.